TRANSFORMAR LA SOCIEDAD
La plataforma
¿Puedes imaginar un mundo en el que la lógica de principio y final no domine tu existencia? Te dedicas a impulsar la transformación social de tu entorno, rodeado de una comunidad organizada que sueña con la prosperidad en todas sus
dimensiones. Utilizando el más alto nivel de desarrollo industrial y tecnológico, buscas transformar tu realidad inmediata y la de tus vecinos. Sin embargo, te das cuenta de que no conoces a nadie, porque probablemente no te interese
hacerlo, y eso es comprensible: es la realidad que te tocó vivir aquí. Con un enfoque claro en el desarrollo cívico y humano, ofreces a las comunidades las herramientas necesarias para alcanzar sus aspiraciones colectivas, pero pronto
te das cuenta de que esas aspiraciones no existen. Aprovechando las avanzadas tecnologías de la información, especialmente las redes sociales, amplías tu impacto tanto en línea como en el terreno, reconociendo la interconexión entre
la vida moderna y la realidad más allá de las pantallas. Todo parece estar en tu contra, todo parece imposible. Excepto vivir el momento a toda velocidad.
Futuro Alternativo es una plataforma social de vanguardia
. Fundada en Chillán, Chile, bajo el nombre de «Regionalismo para Chile» el 22 de agosto de 2023.
La plataforma aspira a ser un espacio inclusivo para ti, si deseas apoyar en trabajo social, activismo y formación política. El Regionalismo desde Futuro Alternativo se organiza bajo la idea del ‘enjambre’, donde el trabajo parte desde abajo, desde las bases, hacia un núcleo central pequeño que mantiene ordenado al grupo. Tú, como colaborador, eres más bien un activista independiente que comparte una serie de ideales centrales, una visión, y aportas desde tu perspectiva, valores y habilidades a la plataforma social. Así, quienes apoyan la plataforma se enfrentan a la vida política como un enjambre, un panal de abejas capaz de trabajar autónomamente en la transformación de aquello que conoces como el futuro, aunando esfuerzos conjuntos.
Apoyas la construcción de una red de voluntades de base, espontáneas y comprometidas, que desean transformar las lógicas de lo normal, lo común y lo posible, desde abajo hacia arriba, desarrollando y experimentando ideas, estableciéndose como apoyo local en la construcción de comunidades.
EMPIEZA POR ALGO SIMPLE
¿Quién podrías ser?
Quienes buscamos un futuro alternativo somos íntegros. Somos honestos y cumplimos con nuestros compromisos. Actuamos con conciencia y no tememos admitir nuestros errores. Enfrentamos problemas sociales y estamos preparados para tomar acciones valientes.
Quienes aspiramos a un futuro alternativo somos críticos. Nos destacamos por nuestra creatividad, curiosidad e insatisfacción con el statu quo. Desafiamos los sistemas y descubrimos sus debilidades. Además, aprendemos de nuestros errores, por lo que adoptamos una postura constructiva y propositiva, en lugar de simplemente oponernos a lo que está mal.
Quienes buscamos un futuro alternativo defendemos nuestra patria y buscamos forjar una nación desde el Estado y las comunidades. Creemos que todos los ciudadanos tenemos el derecho absoluto de participar en las decisiones que nos afectan. Abogamos por una democracia más directa: un sistema abierto, pragmático, dinámico, realista y transparente en el que los ciudadanos tengamos la posibilidad y el derecho de participar, y se nos aliente a hacerlo. El poder político debe desmonopolizarse de los partidos políticos, permitiendo la participación a los distintos grupos intermedios de la sociedad como, por ejemplo, movimientos sociales, sindicatos, colegios profesionales, juntas de vecinos, entre otros.
Quienes aspiramos a un futuro alternativo somos empáticos. Consideramos a la Nación como una tarea diaria e infinita, donde cada persona tiene su espacio para colaborar en su construcción. Esto significa promover el bienestar comunitario por encima del individualismo. Por lo tanto, defendemos una cultura política comunitaria y participativa, surgida desde la base social y sus organizaciones. Abogamos por el fortalecimiento de la economía local, real y circular como un baluarte contra la volatilidad y la imprevisibilidad de la economía mundial, siempre en línea con el proyecto político nacional. Entendemos que la tecnología está transformando el mercado laboral, y cada vez más trabajos tradicionales son automatizados o asumidos por robots. Además, Internet permite bajos costos de transacción y abre nuevas oportunidades para la producción, distribución y consumo. Así, cada vez más ciudadanos se están volviendo independientes, emprendedores y trabajadores por cuenta propia, con todos los riesgos e incertidumbres que esto conlleva. Por tanto, sostenemos que la legislación y la seguridad social deben adaptarse a esta disrupción y a esta nueva realidad. Si bien el emprendimiento debe ser promovido y no castigado, tampoco estamos de acuerdo con que la vida de nuestros compatriotas se convierta en un sinsentido basado en el consumo. Esto rompe con las relaciones comunitarias y nos empuja al individualismo más insano, algo palpable en la realidad actual, donde nuestra rutina está marcada por el modelo económico neoliberal que genera fuertes presiones psicológicas e inseguridad debido a las dinámicas humanas. Por lo tanto, es nuestro deber proteger a nuestras comunidades de una vida sin sentido y combatir toda forma de lógica que deje a cualquier compatriota en la indefensión.
Quienes queremos un futuro alternativo inspiramos a otros. No pretendemos tener la solución definitiva a todos los problemas de nuestra sociedad, pero promovemos un enfoque constructivo e invitamos a todos los compatriotas y aliados de Chile a involucrarse políticamente. Todos pueden contribuir con su conocimiento, experiencia y perspectivas.
Quienes deseamos un futuro alternativo nos comprometemos. Creemos en la autogestión y en la fuerza de los movimientos y organizaciones de base. No esperamos soluciones desde las posiciones de poder, sino que tomamos acciones por nosotros mismos, porque el Pueblo y la Patria tienen su propio poder.
Quienes anhelamos un futuro alternativo valoramos y protegemos la privacidad. Creemos que una comunidad libre solo puede existir respetando los espacios privados. Así también en espacios virtuales, creemos en la soberanía de datos personales que puedan poner en riesgo nuestra vida en comunidad.
Quienes abogamos por un futuro alternativo respetamos todas las formas de vida. Somos pacíficos y nos oponemos a las guerras, aunque estamos dispuestos a defendernos si es necesario. Creemos en medidas como la pena capital para proteger nuestras comunidades y permitirles vivir como deseen, siempre respetando a los demás. Además, nos comprometemos con la defensa y el tratamiento digno de la naturaleza, trabajando para su sostenibilidad y preservación.
Quienes buscamos un futuro alternativo compartimos el conocimiento. Creemos que la información, la educación, el conocimiento científico y los descubrimientos deben ser accesibles para todos como parte de nuestro patrimonio cultural. Apoyamos la apertura y el intercambio de cultura y software libre. Asimismo, respetamos el trabajo de los creadores y reconocemos las dificultades que enfrentan en el sistema actual.
Quienes buscamos un futuro alternativo estamos conectados. A través de la digitalización e Internet, la mitad de la población mundial está conectada en una red horizontal y descentralizada. Esta conciencia colectiva transforma el mundo y nos define.
Quienes anhelamos un futuro alternativo confiamos en nosotros mismos y en los demás. Creemos en la colaboración, en la sabiduría del tejido social y adoptamos una visión constructiva de la vida comunitaria. Así, esperamos contribuir a los bienes comunes y a proyectos colectivos.
Quienes buscamos un futuro alternativo valoramos la diversidad. Queremos aprender de nuestras percepciones, sensibilidades y diferencias. Buscamos ir más allá de la polaridad en todos los aspectos e integrar ideas para orientar el futuro hacia la complejidad de una realidad multidimensional.